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Milito: "Si el club quiere, renuevo ya"

Milito: "Si el club quiere, renuevo ya" Milito se elevó sobre un jueves que no parecía demasiado trascendente para cortar todos los rumores que siempre rodean a su futuro: "Si el club quiere, renuevo ya. Es una decisión que tengo tomada y que ahora deben resolver los dirigentes. Me quedan, con el actual, tres años de contrato; ya he pasado el primero, el más complejo, el de la adaptación al país y a su fútbol, y no existe ningún motivo que me anime a marchar del Real Zaragoza, al contrario", revela el "seis" antes de agriar el gesto: "Y, por supuesto, yo no tengo nada pactado con el Barcelona ni con nadie".

El Mariscal pertenece a ese reducido grupo de personas que piensa más que habla, que hace suyo el siguiente dicho oriental: "Si el ser humano posee dos orejas, dos ojos y una boca, será porque debe observar y escuchar el doble de lo que se pronuncia". No es que no le guste pedir la palabra, de hecho su voz suele ser la que más resuena en cada partido, en cada entrenamiento, pero se dosifica casi hasta el extremo si se le propone una charla con una grabadora de por medio... Apenas ha asomado en los medios este verano, en unos meses en los que demasiados quisieron verle vestido de azulgrana mientras Laporta se hinchaba asegurando que lo ficharía si Rijkaard quería.

Por entonces, desde su residencia en Buenos Aires, el jugador fue claro en unas declaraciones exclusivas a este diario: "Soy del Zaragoza, me debo al Zaragoza y sólo pienso en el Zaragoza". El relato parecía haber escrito su último capítulo con el oficioso arreglo entre ambos clubes para el traspaso de Gabriel Milito al Barcelona al término de la presente temporada por 15 millones de euros... Pero, desde ayer, cuando dedicó a HERALDO una nueva y profunda reflexión, el caso dio una vuelta completa: él mismo, de la mano de su gente de confianza, ha llamado a la puerta del club para avanzar en una posible renovación de un contrato que finaliza en junio de 2007.

El Mariscal no quiso seguir hablando del tema, ya había dicho bastante. Y más que prefirió reservarse: el primer contacto quiso tener lugar este miércoles, pero el Zaragoza anda todavía recuperando el color tras los recientes esfuerzos económicos, entre ellos el pacto de la compra del 50% del pase del jugador que faltaba por adquirir, y no ha respondido a la primera llamada. Se trata seguramente de una postura entendible habida cuenta de que se trata de un jugador con un largo recorrido todavía en la entidad de acuerdo a los años que le quedan de contrato.

Con todo, Milito no pierde la calma. No lo hizo en la final de Copa ante las bicicletas de Figo y las fantasías de Zidane. Pasa el tiempo pensando en el equipo, en la temporada que acaba de nacer y en su hijo lo hizo unos meses antes... "¿El gordo? ¿Te cuento cómo está? Es una bestia, no para de crecer. Y va a tener calidad, eh. Mucha más que su padre", afirma.

Un año lleno de experiencias

Que quiera quedarse no debe sorprender a nadie. Lleva apenas un año en la capital aragonesa, pero se han sucedido tantas experiencias desde que se puso por primera vez esta camiseta que parece imposible meterlas en doce meses: llegada a Zaragoza tras salir rebotado de la revisión médica con el Madrid, ciudad nueva, país nuevo, fútbol nuevo, equipo nuevo..., arranque de Liga más que dudoso en lo colectivo, invierno crudísimo, primavera salvadora y una final de Copa para la gloria eterna: "La pasada fue una temporada muy buena para la institución. Se volvía de Segunda División, llegamos muchos futbolistas nuevos, logramos salvar la categoría sumando 48 puntos, y ganamos un título que nos llena de satisfacción por la dificultad que conlleva ganarlos. Además, nos permite disputar en la actualidad una competición europea. ¿En lo personal? La verdad es que acabé contento con mi rendimiento y, aún más, con el trato que se nos dio a mi señora y a mí".

Desde que llegó siempre dijo que el segundo año iba a resultar más sencillo para el Zaragoza. Por un razonamiento lleno de lógica: ahora se mira al retrovisor y se ve una temporada entera, se observa al compañero y se adivina su intención con el gesto, el rival se cruza con el escudo y recuerda una noche histórica en Montjuic... "Hemos dado un paso adelante respecto la campaña anterior. Somos un equipo mejor y más ajustado. No existe la saturación de jugadores del plantel anterior, en el que muchos no contaban para el técnico. Ahora somos menos y todos vamos a tener opciones".

La melena por ganar la UEFA

Con el título de Supercopa y el liderato alcanzado en la primera jornada se ha hablado mucho de las opciones del proyecto, y las respuestas han conocido todas las tonalidades. ¿Para qué está el Zaragoza realmente? "Estamos para competir al máximo en las tres competiciones, para pelearlas siendo conscientes de nuestras limitaciones pero prohibiéndonos renunciar a nada. Aquí una de las claves puede ser sostener un buen arranque de temporada.

El año pasado sumamos cuatro puntos de los 18 primeros y la memoria sirve para no caer en los mismos errores. Aquel Osasuna debe ser nuestro modelo para esta primera vuelta". .

Una nueva mirada al calendario vuelve a traer la misma pregunta: ¿hay recursos para afrontar tanta exigencia? Y en su caso, la pendiente se empina aún más. Por delante llegan siete u ocho partidos de clasificación para el Mundial 2006 con Argentina: "No sé qué va a suceder con las convocatorias de la selección. Vengo de un encuentro contra Perú, pero era una situación especial porque faltaban Ayala y Samuel. A mí no me supone ningún esfuerzo, al revés, me motiva y da fuerzas. Y sí, yo creo que estamos preparados, aunque todo dependerá de cómo arranquemos porque el fútbol es un estado de ánimo".

Hablando de Samuel, qué piensa Milito cuando, un año después de ser rechazado por su servicios médicos, el Madrid contrata a este central por 20 millones de euros más caro de lo que hubiera costado él y, de rebote, le obliga a perder a Eto"o en favor del Barça. "Nada. Siempre dije que asumí ese episodio con madurez y sin pensar en qué pudo haber sido".

La última, Gaby. Mayo de 2005: ¿dónde se imagina? "Espero que en algún lugar celebrando una muy buena temporada, estamos en condiciones de hacerla". ¿Con la melena afeitada, como Ponzio? "Ni hablar. A él le queda como a Beckham, yo no me lo puedo permitir". ¿Ni ganando la UEFA? "Mira qué te digo, entonces sí"."

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